quarantine

   Tras ver el remake de "REC", "Quarantine", me mantengo en lo dicho la semana pasada: no es ni mucho menos una fotocopia del original. Ojalá lo hubiese sido. Porque, en su afán de desmarcarse del original, han cometido tal cantidad de disparates que parece una parodia de Chiquito de la Calzada del original (que ya me parecía bastante sobrevalorado: lo he vuelto a ver después de su estreno y cada vez me chirrían más los fallos de guión y el lamentable final que ya comenté en su día). Pasen y vean los desastres añadidos.

   Comenzando con el interminable principio en el parque de bomberos, lleno de escenas chorras y con chistes sobre la manguera de los bomberos que no querrían ni en una mala peli porno. Siguiendo con la aparición innecesaria de la cara del personaje del cámara (debe ser porque el actor, Steve Harris, es muy conocido en USA por la serie "El abogado") que incluso llega a resbalarse y caer por los suelos. Tampoco ayudan mucho el exceso de perros (cuando sólo hay uno que tenga escena importante en el filme), ratas (una pisoteada hasta la muerte en una repugante escena gore), vecinos (que no tienen casi importancia) y un francotirador que no salía en el filme original. Y, hablando de escenas desagradables, sobran la pierna gangrenada del zombi y la cutre trepanación de cráneo de uno de los personajes infectados (así como las explicaciones sobre la rabia). Y resultan de chiste los cabezazos con que atacan los zombies cada vez que se acercan a la cámara (éso se llama chupar cámara) y el homenaje a "Poltergeist" (sólo le falta al zombie decir "ya están aquí"). Si encima parece que el fotógrafo se fue de vacaciones (¿hacía falta que fuese tan oscura?) y la protagonista parece en su expresividad una mezcla de Steven Seagal y Jim Carrey (sin término medio), el desastre habla por sí sólo. Eso si, por lo menos nos han ahorrado las explicaciones ridículas sobre el origen del mal (aunque salga el personaje de la niña portuguesa). Incluso me han entrado dudas sobre su nacionalidad americana: teniendo en cuenta que entre los productores están los del filme original y que pone una presentación de Filmax, más bien parece una de aquellos filmes que perpetraron hace unos años en España Brian Yuzna y compañía que intentaban pasar por filmes americanos con resultados desastrosos ("Fausto: la venganza está en la sangre", por ejemplo). Serio candidato a peor filme del año