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carlosmartinez

Phenomena: Sonrisas y lágrimas

Este miércoles Phenomena proyecta un gran clásico del cine musical, no exento de polémica entre los cinéfilos y cuyo doblaje es probablemente uno de los mayores desastres que se recuerdan:

Sonrisas y lágrimas:

 

 

Le han dicho de todo, incluso uno de sus protagonistas, ñoño, cursi, excesivamente infantil... Pero tiene multitud de fans y es una de las películas más taquilleras de la historia, creo que la que más hasta que llegaron Tiburón y La guerra de las galaxias, algo debe de tener para atraer tanto. Yo me quedo en un término medio, el tono de la historia no me convence, y Robert Wise ha tenido trabajos mejores que este, pero la banda sonora es maravillosa, y Julie Andrews está muy bien, aunque mejoraría con los años (concretamente con sus colaboraciones con su marido Blake Edwards).

El caso es que este musical llega en 1965 en uno de los peores momentos de 20th Fox, con grandes pérdidas por Cleopatra y amenazando ruina. Los productores decidieron arriesgarse con una musical como este de gran éxito en teatro, y tomaron una decisión que hoy en día puede considerarse muy arriesgada, coger a una actriz británica desconocida para el gran público (solo había protagonizado Mary Poppins, pero no se había estrenado todavía, al menos de cara al gran público, parece ser que la vieron en un pase privado) llamada Julie Andrews. Insistieron en contratar a Robert Wise, codirector de West Side Story, que tenía otro proyecto entre manos que se retrasó (la posterior a esta El Yang-Tse en llamas) y, aunque la primera opción era Dean Martin para el protagonista masculino (¿Martin aristócrata? Eso sí hubiese sido un error de casting de aupa), escogieron al actor canadiense Christopher Plummer que luego les saldría rana, al menos en las declaraciones posteriores al rodaje. El estreno fue un rotundo éxito, aunque con críticas nada positivas por las razones que siempre se han manifestado, éxito ayudado porque Andrews ya se había convertido en estrellacon Oscar por Mary Poppins, y se convirtió rápidamente en un taquillazo. Aún con las reservas de la crítica, ganó cinco Oscars (película, director, montaje, banda sonora adaptada y sonido). Hoy día es todo un clásico del cine familiar.

Mal que le pese a Plummer. Nunca estuvo de acuerdo del tono del filme (con licencias gordas respecto a la historia real de la película, basada en una familia cantante austriaca huida del nazismo muy conocida en los años 40, y cuya auténtica Maria von Trapp dicen que aparece como extra en algunas escenas de la película; la licencia más grande es la huida final, realmente huyeron en tren, no por las montañas de Salzburgo, ya que por allí se va derechito al sur de Alemania, lugar poco recomendable para huir del nazismo en 1938) y con la interpretación musical de Andrews, de hecho Plummer rebautizó el filme como The sound of mocus (El sonido de los mocos). No se debieron enterar los responsables de los Oscars de este 2013, porque lo recibieron al son de la banda sonora de la película.

Me quedan por comentar tres disparates relativos a la película. Uno, el doblaje español. Mal empezamos si ya cambias El sonido de la música por el patético Sonrisas y lágrimas, pero es que no acabaron ahí los desmanes: decidieron doblar las canciones, y ahí se "lucieron". Mal, muy mal están The sound of music, María o The lonely goather dobladas, pero lo de Do, re, mi no tiene nombre. Primero pondré la letra original en inglés del estribillo:

Doe, a deer, a female deer
Ray, a drop of golden sun
Me, a name I call myself
Far, a long, long way to run
Sew, a needle pulling thread
La, a note to follow Sew
Tea, a drink with jam and bread
That will bring us back to Do (oh-oh-oh)

La verdad es que los compositores Rodgers y Hammerstein se tomaron sus licencias con las notas musicales, ya que hay dos claras variaciones respecto a la notación procedente de la composición latina de la que surgieron (menos do, que un espabilado italiano cambió por do porque eran las iniciales del nombre), sol y si sustituidas por sew y tea; curiosamente las notas en inglés son diferentes, C D E F G A y B. Pero el traductor hizo un completo disparate. Aquí tenéis la traducción:

DON- es trato de varón
RES- selvático animal
MI- denota posesión
FAR- es lejos en inglés
SOL- ardiente esfera es
LA- al nombre es anterior
SI- asentimiento es
Y de nuevo viene el DO
DO-DO-DO

Demencial en todos los sentidos, solo se explica por como han dicho algunos por los efectos de alguna hierba no procedente precisamente del Tirol. Lamentablemente, dado el éxito del filme, cada vez que se ha representado la obra en España nadie se ha atrevido a cambiarla.

Segundo disparate, según algunas fuentes que no he podido confirmar: la censuraron en Alemania en el momento de su estreno, supongo que por el tema del nazismo. Por lo que dicen, tras la boda, decidieron concluir la película, todo el que la haya visto sabe que todavía quedan bastantes minutos. No lo he podido confirmar y parece ser que se arregló posteriormente, pero de ser cierto es una salvajada.

Y tercer disparate, le salió un grano en el culo en España en forma de plagio. Una bióloga metida a actriz (si se le puede llamar así a ese engendro llamado Ana Obregón) decidió "actualizarla" cambiando a una novicia por una stripper. El esperpéntico resultado responde al nombre de Ana y los siete, para mí una de las mayores aberraciones vista en una pantalla de televisión en la historia.

A pesar de todo y de sus detractores, Sonrisas y lágrimas es un gran musical y un estupendo espectáculo para toda la familia, pero en VO.

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