Blogia
carlosmartinez

cobardes

   Bienvenidos a mi blog de críticas de cine. Espero que muchos de vosotros estéis disfrutando del largo puente del 1 de mayo (y del 2 de mayo en Madrid, por si me está leyendo alguien de allí), pero me gustaría comentar algo sobre las celebraciones de esta semana: el 2 de mayo es una fecha muy señalada en nuestra historia, pero no sé si es muy adecuado celebrar con tanto fasto una fecha tan fatídica para España, de consecuencias terribles: invasión napoleónica, miles de muertos y exiliados, llegada de Fernando VII al poder, vuelta de la inquisición... y a más largo plazo, el comienzo de las dos Españas que desembocará en las guerras carlistas y en la guerra civil de 1936-1939. Así, que más que celebrar tan funesta fecha, lo mejor que se puede hacer es echar un vistazo a cualquiera de las pinturas de Goya sobre tan terrible guerra: ahí está todo el horror que supuso la Guerra de la Independencia.

   Pasando a las noticias de la semana, si alguien pretende que hable en profundidad sobre el execrable caso del secuestrador austriaco, va listo: sólo reseñaré la lamentable opinión que me merece la información que han dado Tele 5 y otras cadenas sobre el tema, con todo lujo de detalles y morbo: una cosa es informar y otra recrearse en el tema (estoy seguro que les durará más de una semana, porque no es el primer caso) abriendo todos los telediarios de la semana con el tema. Sinceramente, me parece que hay otros temas mucho más importantes, y ahora mencionaré un par de ellos.

   Sin duda, el más importante, y el que más puede afectar a nuestra salud, es el caso del aceite de girasol, nuevo ejemplo de que nuestro país sigue siendo el reino de la chapuza  (aquí también en colaboración con otros países; de esto no se libra nadie). Destacar la lamentable desinformación del Gobierno sobre el tema, y recomendar una cosa al ministro Bernat Soria, que dijo qe estaba dispuesto a beberse el aceite para demostrar que no había peligroso: como sabrá todos lo que conozcan el idioma catalán "beure oli" (beber aceite para los no catalanes, frase hecha muy común en Cataluña) no es muy recomendable.

   Y no menos destacable, mencionar el adiós a la política (espero que sea definitivo) del inefable Eduardo Zaplana, maestro del chanchullo, las sospechas de corrupción y de la crispación política, responsable de estropear más todavía la tierra de mis ancestros, Benidorm, en su época de alcalde. Y que me explique alguien cómo puede haber sido nombrado semejante individuo delegado en Europa de Telefónica sin saber un solo idioma. Sólo le deseo una cosa: que tan bien le vaya como descanso deja.

  Pasando a comentar las películas estrenadas esta semana, hay que empezar por comentar dos de los filmes más premiados en el pasado Festival de Málaga, de los cuales uno me ha decepcionado y el otro me ha parecido lamentable.

   La decepción sin duda ante "Cobardes", último filme de José Corbacho y Juan Cruz, ha sido muy grande tras los prometedores resultados de su primer filme, "Tapas". Su nuevo filme no deja de ser un correcto trabajo en sus mejores momentos (en los peores parece un mal episodio de "Compañeros") que se sostiene por el trabajo de sus jóvenes protagonistas, pero cuyo guión cae en picado en la parte final: el descubrimiento de la historia real del dueño de la pizzería parece un mal chiste, y la escena final me parece poco menos que inadecuada. Comentar el primer trabajo como actriz seria de la humorista Paz Padilla, no porque sea especialmente destacado, sino porque no es el único caso esta semana de actor o actriz cómico metido a actor serio. Como comprobaréis en otra crítica más adelante, hay unos cuantos casos más esta semana. Gran decepción, aunque comparada la película con el otro estreno español de esta semana parezca una obra maestra.

0 comentarios