Ted 2

Casi podría hacer de Ted 2 la misma crítica que hice en 2012 de la primera, porque tienen los mismos defectos que la anterior. Seth Macfarlane nos ha vuelto a dar gato liebre tras la para mí mucho más divertida Mil maneras de morder el polvo. Por mucho taco y semen que aparezca en la película, esto no es sino la misma comedia familiar con muñeco parlante de siempre, con una trama ridícula de búsqueda de identidad e intento de buscar un hijo adoptivo, y con climax penoso con Giovanni Ribisi haciendo el ganso en busca del oso. Y el doblaje, de nuevo de juzgado de guardia, da grima oir hablar a los personajes de, agarraos, Isabel Preysler, el juez Garzón y Puerto Hurraco, y alguien le debería haber explicado a Santi Millán que lo de la Vane es ya un chiste viejo, especialmente si el personaje se llama Tammy-Lynn... Afortunadamente, no ha repetido éxito respecto a la primera, lo único salvable es el número musical de los títulos de crédito.