retratos del más allá

   Y, por último, comentar el estreno de "Retratos del más allá". Por enésima vez tengo que decir lo mismo: estoy hasta las narices del cine asiático de fantasmas y sus consiguientes copias americanas. Este filme sólo difiere de los anteriores en una cosa: en un final absolutamente bochornoso, patético y ridículo que aquí no comentaremos para los que quieran ver semejante engendro. Y después de ésto, sólo me queda prometer una cosa: no volveré a ver una película de fantasmas asiáticos hasta que éstos sean luchadores de sumo, calvos y con un montón de años, ya que los de costumbre suelen ser jóvenes (preferentemente niños), delgados y melenudos. Y, si alguien quiere ver fantasmas japoneses que den miedo, que le eche un vistazo a la obra maestra de Kurosawa "Trono de sangre": aún saliendo en una sola escena, ese fantasma o brujo da mucho más miedo que todo el cine de terror asiático actual junto.

   La semana que viene hablaremos del último filme de Isabel Coixet, "Elegy".