los girasoles ciegos

   "Los girasoles ciegos" pasará  a la historia del cine español por ser el último guión del gran Rafael Azcona, fallecido hace pocos meses. No conozco la obra literaria en que se basa la película (al parecer compuesta por cuatro relatos de los que se han adaptado dos) y no sé la fidelidad del guión, pero da la impresión de que Azcona ha puesto muchas cosas personales suyas: un retrato negrísimo (que a pesar de ser una tragedia, no soslaya el humor como en la escena del cine) de la España de la posguerra, muy anticlerical (impagables los cuatro curas; dan ganas de hacerse ateo) y muy bien escrito. Quizás el director José Luis Cuerda esté un poco por debajo de lo que la historia necesitaba (siempre se le ha dado mejor la comedia que el drama, salvo "La lengua de las mariposas"), pero tampoco hace nada grave que estropee la película. Destacar la interpretación de Maribel Verdú y del prometedor Raúl Arévalo. Muy recoendable película aunque no llegue a ser una obra maestra. Hasta siempre, maestro Azcona.