perdona si te llamo amor

  Por último, "Perdona si te llamo amor". Si la comedia romántica americana es espantosa,  copias como ésta ya producen escalofríos. Una sucesión de escenas y chistes malos vistos infinidad de veces (ya ni la primera tenían gracia), un director inepto (por lo menos el autor de la novela original no se quejará de la adaptación: es la misma persona) y unos actores todo lo guapos que queráis, pero que no tienen la más mínima idea de interpretación (y encima, se están muchas escenas en la cama, pero  son más pudorosos que una monja y se tapan las partes íntimas en todo momento). Lo peor de todo es que probablemente haga bueno el último filme de Jenifer López y similares y que uno se imagina a los productores americanos preparando el remake con Ben Affleck y Hannah Montana de protagonistas. No es una buena muestra de la decadencia del cine italiano actual; probablemente es su certificado de defunción.

   La semana que viene sí que este blog se toma un descanso obligado, porque me falta tiempo para ver películas. Volvemos dentro de dos semanas comentando la versión de Ridley Scott del personaje de Robin Hood. Conociendo al director británico (capaz de lo mejor y de lo peor), podemos esperar cualquier cosa, desde una obra maestra a uno de los engendros del año.