Espía como puedas
Si no fuese tan serio el tema, pasaría por un argumento de Mortadelo y Filemón. Veamos: político hijo de presidente de la Generalitat que presuntamente llevaba dinero negro a Andorra, exnovia que llama a dirigente del PP catalán y le cuenta la trama en un restaurante que "casualmente" tenía escuchas de una agencia de detectives cercana, la dirigente se calla, se descubre el pastel por las escuchas y lo único que parece claro es que los culpables son los que espiaban...
Pues aquí nadie se salva. El político, si se demuestran los cargos, por corrupto, la exnovia por no denunciarlo inmediatamente a la policía en vez de a otro político, la dirigente del PP también por no denunciarlo y callarse (no me sirve que diga que la que tenía que denunciar la otra, si te callas algo tan serio como el desvío de capitales estás cayendo en delito de encubrimiento), los espías, fuesen contratados por quienes fuesen, por hacer escuchas ilegales, y el que los contrató, sea el que sea, porque en teoría no estamos en un estado policial y no se pueden hacer estas cosas de espiar al prójimo sin orden del juez y tomándose la justicia por su mano, siendo benévolos. Lo dicho, digno de un argumento surrealista o de una parodia de cine político al estilo Costa-Gavras, que se vayan a hacer gárgaras todos, y que acaben en la cárcel como mínimo el político y el que ha mandado las escuchas (lo del posible tema del encubrimiento, para mí también es motivo al menos de dimisión).
2 comentarios
carlos martinez osorio -
sacerdote -