Mi casa en París

 

Jamás diré aquello tan sobado de "teatro filmado" para menospreciar una película como ha soltado algún crítico respecto a Mi casa en París. Respeto demasiado el teatro como para pensar que es fácil trasladar una obra al cine, y respeto demasiado al cine como para pensar que es fácil hacer una película entre cuatro paredes, y además conozco unas cuantas obras teatrales que sin esquivar el origen teatral han sido llevadas muy bien al cine, sin ir más lejos La huella o Un dios salvaje

Así que habiéndome distraido el filme, mis peros van por otro lado. No conozco la obra de teatro, pero creo que lo que he visto en cine iba en la dirección equivocado. La trama daba para un ¿Qué ocurrió entre tu padre y mi madre en París? (me recuerda a la película de Billy Wilder, con alguna retranca que no comentaré aquí, para no hacer spoiler) y les ha salido una suerte de El  hotel Marigold parisino (será porque comparten actriz, Maggie Smith), o sea, ni más ni menos que otra feel good aséptica, que no hace daño y que no molesta, ideal para echarse una siestecita en verano. Y no molesta, porque tiene a tres actores enormes, la mencionada Smith, Kevin Kline y Kristin Scott Thomas, ellos hacen que una película que es menú del día parezca caviar. Simplemente entretenida.