los mercenarios

   El otro filme, "Los mercenarios", es una buena muestra de la carrera del inefable Silvester Stallone. Por mucho que haya trabajado con Woody Allen y John Huston y de tener dos nominaciones al Óscar por "Rocky", nuestro hombre nunca ha sido ni buen actor (aunque creó una escuela peor: Steven Seagal, Dolph Lundgren...), ni buen guionista ni buen director. Eso sí, solía tener una vista de lince para la taquilla.

   El hombre sabía que con 60 y tantos años e hinchado de bótox no está ya para demasiados trotes y en este nuevo filme opta por la autoparodia claramente. Porque esta falsa reunión de viejas glorias (realmente de los actores más veteranos sólo tienen peso en la historia él y en menor medida Dolph Lungren, lo demás son cameos o papeles muy pequeños) hecha con menos presupuesto del que parece (produce la especialista en series B-Z Millenium, especialista en hacer pasar por rodajes norteamericanos filmes hechos en otros lados, en este caso Brasil, y se nota en unos efectos especiales bastante mejorables), lo que hace es tomarse a mofa el género que le llevó al estrellato. No hay manera de tomarse en serio una película que ya en los primeros minutos matan de manera chapucera (con llamada al móvil incluida) a unos cuantos piratas somalíes, ni una historia sin pies ni cabeza sobre un dictador de república bananera  del que no se sabe realmente qué pinta allí la CIA, y cuyos personajes tienen unos nombres "curiososos" (Mr. Cristmas, Ying Yang, Mr. Church; prefiero ponerlos en su nombre original y no los castellanizados). Finalmente, se nota mucho que el que está en buena forma es Jason Sthatam, por cierto bastante mejor actor que Stallone aunque no tenga muy buen ojo para escoger papeles, que quizás es lo mejor del filme. El filme puede resultar simpático por su delirio y su disparate (ojo, no quiere decir que sea bueno), pero Stallone haría bien en retirarse de una vez de la interpretación. Y en cuanto a la reunión de viejas glorias, uno hubiese preferido que hubiesen tenido más cancha los personajes de Bruce Willis y Mickey Rourke, quizás los más interesantes del guión.