Insidious 3

 

Lo he comentado un montón de veces: el cine de terror moderno es en general como el cuento de la gallina de los huevos de oro,  exprimen los responsables la idea, buena o mala, hasta que la dejan seca, y uno acaba hasta el gorro, porque la mayoría de las sagas acaban siendo insoportables en las últimas entregas.

La tercera entrega está prácticamente agotada. Lo que en la primera funcionaba, el bajo presupuesto y los inquietantes fantasmas que la poblaban, ya chirría. No hay absolutamente ni una sola idea nueva, ni un solo momento terrorífico que sea ni destacable ni predecible. El resultado: aburrimiento mayúsculo, salvo para los muy fans de la saga. Dado el bajo presupuesto con el que suelen trabajar sus productores Orem Peli y Jason Blum, aunque la película no haya tenido el éxito de anteriores entregas sigue dando buenos dividendos, así que me temo que no será la última, esta desde luego es para olvidar.